El Parque Agrario de Fuenlabrada visita proyectos agrarios de Segovia
Una delegación de agricultores y técnicos del Parque Agrario de Fuenlabrada visitamos diferentes experiencias agrarias en Segovia.
Una delegación de agricultores y técnicos del Parque Agrario de Fuenlabrada visitamos diferentes experiencias agrarias en Segovia. El martes 14 de febrero pudimos conocer de primera mano las instalaciones de Hortalizas Los Claveles, el proyecto de agricultura ecológica Ecoeduco y los Viveros Veganiña de producción de planta de fresa y espárrago.
La visita se centró en la comarca del noroeste segoviano del Carracillo. Esta comarca aloja a un entorno rural económicamente pujante debido al aprovechamiento que ha realizado su población del acuífero, recargado con aguas invernales del río Cega, para mantener sus actividades agroganaderas.
Hortalizas Los Claveles
Esta empresa familiar lleva más de 30 años produciendo y elaborando cultivos hortícolas en sus instalaciones de Gomezserracín, dando trabajo a más de 50 personas. Se dedican al cultivo de zanahorias, cebolletas, nabo y otras verduras, siendo el puerro su especialidad. Han conseguido cultivar puerro pudiendo cosecharlo a lo largo de todo el año. Para ello se han desplazado a otras dos zonas, además de las huertas que cultivan en el Carracillo. En las instalaciones podemos ver las maquinarias de lavado, preparación y envasado del puerro, así como los aperos que utilizan para la plantación, el aporque y la cosecha de sus cultivos.
Posteriormente visitamos una parcela de una hectárea y media de puerro.
Ecoeduco
Albano Sastre, cofundador de la empresa junto con su hermano, nos recibe en una de sus parcelas que suman un total de 150 ha dedicadas al cultivo de hortalizas ecológicas. Hijos de agricultores, tras formarse técnicamente deciden transformar las tierras familiares a ecológico en 1999. Cultivan multitud de verduras así como cereales y legumbres de secano, con los que consiguen tener unas rotaciones que les permiten gestionar la fertilidad del suelo así como las hierbas silvestres, que son un reto para todo agricultor ecológico.
Visitamos una parcela cultivada con zanahoria de invierno que ha cubierto con manta térmica en los últimos meses para proteger de las heladas. Para realizar las siembras de zanahorias y poder cosechar las cantidades que permiten mantener una empresa con 60 trabajadores han tenido que mecanizar mucho las labores. Disponen de dos tractores que realizan las labores con GPS. Esto les permite sembrar las zanahorias dejando líneas rectas entre las que pasarán los aperos escardadores reduciendo las tareas manuales.
Cultivan sus tierras uniendo el saber tradicional con diferentes técnicas ecológicas como la biodinámica, los abonos verdes o las rotaciones. Gestionan los residuos de los cultivos realizando su propio compost, mezclándolo con estiércol de ganaderías de vacuno ecológicas de la zona. Para ellos el aporte de materia orgánica es la base de la fertilización de sus suelos, lo que les permite tener cultivos sanos.
Albano nos enseña también uno de sus dos centros de elaboración situados en Campo de Cuéllar. Allí han conseguido transformar sus productos directamente para poder controlar desde la producción, el valor añadido de sus productos elaborados.
Viveros Veganiña
Por último, por la tarde visitamos las instalaciones de Veganiña de la mano de su gerente Jose Fernando Torrego. Veganiña es una empresa que continúa con la tradición agrícola familiar, en este caso produciendo planta de fresa y espárrago, siendo uno de los mayores productores de planta de estos cultivos de la península ibérica. Al año producen 40 millones de plantas de fresa y 10 millones de garras de espárrago. Para poder mantener a las más de 50 personas que trabajan en la empresa en las épocas en las que no hay tareas en los cultivos de planta de fresa y espárrago, cultivan cebolleta, pudiendo cerrar así el año agrícola con labores continuadas.
En las naves situadas en Navalmanzano, podemos observar el bullicio de la temporada de venta de garras de espárrago. Vemos como los camiones traen las garras recién sacadas de la tierra a la nave, como las personas encargadas de la limpieza de garras las separan, calibran y ensacan y cómo las almacenan permitiendo su aireación para que lleguen en perfecto estado a las tierras donde se van a cultivar.
Jose Fernando nos enseña una de las tierras donde están sacando las garras de espárrago de variedad Vegalim y allí nos cuenta cómo se debe de cultivar el espárrago: se planta la garra en primavera, dejándola crecer sin cosechar el primer año, para que la parte aérea de la planta permita a las raíces almacenar los nutrientes. El segundo año se cosecha unos veinte días, dejando crecer el resto de brotes sin cortar. En verano se dejan de regar para que la planta se seque y forzarla así a que almacene nuevamente los nutrientes en las raíces, desbrozando la parte aérea. Desde el tercer al séptimo y puede que hasta el décimo año, se cosechan los espárragos durante 50 a 60 días.
De vuelta a Fuenlabrada, en el autobús, comentamos los éxitos y los que tienen por delante los proyectos agrícolas de esta zona, tan parecida en clima y suelo a las huertas del Parque Agrario.